“Esa vuelta radical hacia lo vintage es preocupante”
Este estudio de arquitectura murciano se anticipa a las tendencias con un conocimiento profundo de las innovaciones técnicas y vocación de resolver los problemas que plantea cada nuevo proyecto. La variedad de espacios en los que trabaja, desde el residencial al público, obedece a una estrategia de alejamiento de la especialización que mantiene la frescura del trabajo diario.
¿A qué os referís cuando habláis de proyectos singulares como especialización del estudio?
Frente a la hiperespecialización, he preferido siempre que mi equipo se especialice en la resolución de problemas arquitectónicos sean cuales sean los programas. Es cierto que la experiencia te permite fundamentalmente no repetir errores, pero demasiada experiencia, o demasiada repetición de soluciones te lleva al peligroso camino sin salida de pensar que lo sabes todo. Situación que te aniquila como creador, ya que el hecho creativo necesita de la duda y del vértigo como estimulantes.
La mejor manera de protegernos de esto es formar equipos dentro de la oficina donde algunos miembros tienen mucha experiencia en un determinado aspecto y otros no. De esta manera se estimula lo que es realmente importante: resolver problemas arquitectónicos complejos. Lo importante son las preguntas. Y por eso, en respuesta a este porfolio tan variado, los clientes se aproximan a nosotros con problemas igualmente variados. Es decir, si solo haces viviendas, solo te buscaran para que hagas viviendas. Procuramos evitar esa situación.
¿Cuál es el vínculo entre arquitectura e imaginación?
Debemos tener sueños imposibles tales que, narrados, parezcan irreales. Esos son los puntos de partida que nos hacen avanzar. Luego la arquitectura, el interiorismo y sus estrategias técnicas nos permiten llevarlos a cabo, a veces literalmente y otras reproduciendo conceptualmente las experiencias extraordinarias que andábamos buscando. Ese es el vínculo. Así que, desde el sentido común, pero sin complejos, trabajamos para que nuestros proyectos puedan llegar tan lejos como la imaginación del equipo. El avance de la tecnología tanto en el diseño como en la construcción nos acompaña y hace viables ideas que quizás algunos años atrás habrían sido impensables o inasumibles económicamente.
Una semblanza en pocas líneas de la trayectoria de Clavel Arquitectos…
Estudié la carrera en Madrid en unos años interesantes en la Escuela de Arquitectura y a continuación con una beca de la Caja de Arquitectos trabajé con Alejandro Zaera en Londres. Clavel Arquitectos se crea en Murcia en el año 2003. Los primeros proyectos fueron locales con algunas obras de pequeña escala, pero de gran impacto como la Casa Cruzada. Pero la vocación de nuestro trabajo siempre fue internacional. Construimos varios proyectos en Italia y China. En 2012 la Escuela de Arquitectura de Miami me invita a dar clase y ahí damos el salto a EEUU, que se ha concretado en los últimos años en proyectos como el Museum Garage, en el Miami Design District, o el nuevo restaurante en Dubái para Alain Ducasse, el chef con más estrellas Michelin del mundo. Dos proyectos creados desde lo local sin complejos.
Seleccionáis los proyectos, no por su tamaño, sino por el potencial que pueden tener para crear una ciudad mejor ¿podéis ampliar este concepto?
Eso es cierto. Hay pequeños proyectos con gran impacto pues hay margen de investigación que otra escala no permite. El Panteón Nube o el Pabellón Ultraligero de la Bienal de Arquitectura y Urbanismo de Hong Kong son dos ejemplos: el primero contemplativo y el segundo interactivo. Siempre procuramos que nuestros proyectos tengan un saldo positivo en la sociedad y con la ciudad. Como el Pabellón Regalable, otro proyecto de pequeña escala que cuando se desmonta se entrega (se regala) en macetas a los ciudadanos.
Luego está el ejemplo de los aparcamientos, infraestructuras en general denostadas a las que llevamos tiempo dedicando mucho trabajo para humanizarlas con diseños que, a la vez que mejoran la experiencia del usuario, buscan crear un ambiente más seguro, especialmente para los sectores de la población que más desprotegidos se sienten en la actualidad.
Algunas de nuestras propuestas arquitectónicas han derivado también en propuestas de mejora a nivel urbano, tratando de devolver al peatón la calle que el vehículo arrebató en las últimas décadas. Pienso que ese trabajo de pequeña y gran escala debe simultanearse en el estudio para no perder la sensibilidad que requieren las dos aproximaciones.
La respuesta emocional a vuestro trabajo también es una preocupación básica, ¿cómo lo explicáis?
Hay una aproximación lúdica en parte de nuestro trabajo que genera un tipo de emoción que complementa a la que deriva de la belleza. En ese sentido, el objetivo final es empatizar con el usuario, tratar de crear complicidad. En ocasiones a través de la arquitectura, reproducimos experiencias que hemos tenido en otros lugares, en otros momentos. En los restaurantes para Nazario Cano en Odiseo, hay todo un reflejo de lo mediterráneo. El agua, la vegetación, lo imperfecto, el olor a esparto, la cerámica artesanal… Es una colección de emociones que compartes, como cuando vemos algo que, en cuanto ocurre, estamos deseando contar a nuestros amigos. Cuando viajo trato de documentar esas emociones más que una solución compositiva determinada.
En todo momento tratamos de ponernos en la piel del cliente y del usuario cuando realizamos nuestros diseños. Y en todo eso influyen los materiales, las texturas, el sonido, los olores, la luz… Se trata de reensamblar esos elementos con el fin de reproducir esa atmósfera y que llegue a emocionar.
Proyectos como el Museum Garage de Miami han tenido gran repercusión mediática y varios premios ¿qué suponen para el estudio?
El Museum Garage ha sido una pieza fundamental en nuestra carrera por el enorme impacto en medios internacionales y el propio éxito del edifico en la ciudad de Miami. Hasta finalizar ese proyecto nuestra presencia se centraba en Europa, Asia y Medio Oriente, por lo que necesitábamos de un pequeño empujón para completar el alcance de nuestra oficina en el continente americano. Por la ubicación y por el cliente (el conglomerado francés de lujo LMVH) no podíamos meter la pata, pero tampoco quedarnos cortos. Éramos conocedores de que había mucho en juego en ese proyecto. Finalmente, este edificio recubierto con coches dorados y plateados se ha convertido en un atractivo turístico y en un nuevo icono para la ciudad. Como anécdota te diría que el autobús turístico de la ciudad tiene parada en el edificio. Así que ha sido una historia con final feliz con reconocimiento tanto de los colegas como de los ciudadanos. Es ya un edificio Pop y eso nos encanta.
¿Trabajáis con conceptos desarrollados en vuestro estudio aplicables a todo o se empieza desde cero en cada nuevo proyecto?
La cuestión estilística o compositiva no nos parece muy relevante en estos momentos, así que no está en los inicios de los proyectos, pero hay sin embargo una aproximación más holística que tiene que ver con la “experiencia” a la que hacía referencia antes. Es algo que innegablemente se relaciona con la ortodoxia arquitectónica pero que reflexiona y coquetea con la manera en que el público consume la arquitectura a través de los medios. Es decir, me interesa la capacidad de sorprender, pero no la de imponer como hacía el brutalismo con sus piezas bellas y rudas, pero formuladas de manera poco amable con los ciudadanos. Tenemos la obligación de no ser tan autorreferenciales y conectar más con los usuarios.
CLAVEL ARQUITECTOS. Architecture and Interior design. Callejón Peligros 3, 3ºA. 30001. Murcia. T. 968.212.314. 2929 North University Drive. 33065 Coral Spring Florida. EEUU. T. 305.809.0598.
