Un punto de encuentro confortable

Índigo Cafetería, Barcelona

Cuando los clientes contactan con Scala Studio para realizar este proyecto, vieron que lo que pedía ese espacio era reducir el ruido visual, unificar los distintos elementos que conforman el espacio y generar un ambiente relajado, cómodo y distendido para convertirlo en un punto de encuentro confortable.

Los clientes tenían muy claro que la identidad de su cafetería iba estrechamente ligada con el color Índigo, pero no tenían claro de qué forma plasmarlo en el espacio. La idea era evitar que apareciera como salpicaduras esparcidas puntualmente, ya que eso huía del objetivo que tenía el estudio de simplificar. Por ello pareció una opción muy potente bañar completamente del color azul índigo un área específica del local, tintando de color azul todo lo que se encontraba por el camino.

Otro punto que pareció básico potenciar fue la piedra original que se intuía que existía detrás del mural y de inmensas capas de pintura. Por la ubicación del local y el tipo de arquitectura, el estudio creyó que encontraría una piedra interesante y, tras hurgar entre las distintas capas de yeso y pintura, apareció. La piedra surgió como un elemento decorativo en sí mismo y con un gran protagonismo.

En cuanto a las baldosas de la barra, se buscaron tonos ocres y tostados que recordaran al café y a todo lo que lo rodea. En referencia al mobiliario y decoración, se buscó aportar la calidez que le faltaba al envoltorio, por ello se usó principalmente madera, tanto para las mesas como para las sillas, a excepción de la zona azul donde se hizo lacar del mismo color los taburetes de hierro.

En referencia a la iluminación, para aportar ese toque de calidez tan anhelado, se eligieron unas lámparas de suspensión en forma de bola de cristal que aportaba una luz cálida que ligaba todo el concepto del interiorismo que se había imaginado.

Por último y para rematar el ambiente de confort, se colocaron unos árboles de encinas secos, cuyas ramas y altura eran ideales para este tipo de local, ya que llenaban el espacio y lo decoraban sin saturarlo.

Proyecto: Scala Studio. Fotografías: Sara Adroer. Diseño gráfico: Métricas Studio. 
Mobiliario: Sklum, Dadra. Iluminación: Nordlux.