El cliente buscaba un restaurante moderno que ofreciera un ambiente relajado, donde poder degustar los mejores arroces y pescados de Barcelona. El diseño propuesto intenta semejar el ambiente mediterráneo dentro del espacio, cálido, suave y romántico. El resultado es un atemporal y moderno espacio que intenta difuminar el interior con la terraza exterior del centro comercial de Diagonal Mar.
El objetivo del proyecto es el de hacer sentir al comensal que se encuentra en el interior de una escena totalmente marítima, sentarse en el restaurante tendría que ser como sentarse en el interior de un velero observando la puesta de sol. La arquitectura del edificio hizo pensar inmediatamente en un navío. Un lugar donde los espejos se convierten en ventanas de camarotes, donde los pavimentos recuerdan a los de un barco antiguo y donde la iluminación cobra todo su sentido con lámparas al más puro estilo bergantín.
La materialidad de los elementos como el cobre de la campana extractora y el pilar central de la sala, al igual que el ambiente general del espacio, encuentra su inspiración en los clásicos y elegantes barcos. La jardinera que separa las dos salas hizo pensar en los arrecifes mediterráneos, frescos, verdes y acogedores.
En la zona central de la sala principal se encuentra una zona diferenciada, cubierta con hiladas de cuerdas que sostienen por un lado al mueble de servicio principal y por el otro lado, unos pórticos de madera de roble que cubren tres sofás, acotando de esta forma el espacio para hacer sentir más cómodo al comensal.
Proyecto: Carlos Martínez Interiors. Fotografías: Eugeni Pons. Cala Rossita. Avda. Diagonal, 3, 08019 Barcelona.
