DB de Sancal es el acrónimo de “diamante en bruto”, apelativo con el que Elena y Esther Castaño han bromeado durante años cada vez que se acomodaban en un viejo prototipo diseñado por su padre, Santiago Castaño. Sus diagonales y ángulos facetados, aplicados incluso a las patas, recuerdan a la codiciada piedra.