Una caja de hormigón acristalada, planta cara a unas ideas que hablan de elementos naturales y de la simbiosis entre éstos y la arquitectura.
Frente a esta situación aparentemente poco afortunada, se potencian los huecos en fachada, generando una continuidad entre el interior con el exterior y se crea una doble piel que cubre, distribuye y sirve de apoyo al interior del restaurante. Como si de un emparrado se tratase, el suelo y el techo se conectan y dan servicio al espacio. La madera asciende en forma de celosía cubriendo y generando particiones que unifican, distribuyen y privatizan el interior de Viterra al mismo tiempo que privatizan la tan directa conexión con el exterior existente. Se ensalza el hormigón como elemento áspero, comparable a la tierra albaceteña y se contrasta su aridez con una escalera lisa y azul. Como una “deconstrucción” del agua que suaviza y alimenta la tierra, esta escalera separa una de las zonas más privadas de Viterra, de la zona de cocina y un gran comedor.
El mobiliario, de líneas rectas, no compite con el entorno, sino que sirve de apoyo a un concepto que juega más con los materiales, texturas y colores.
Proyecto: Nihil Estudio. Fotografías: Nihil Estudio. Viterra Natural. Vía de circunvalación, esq. Hortensia, 02640 Almansa, Albacete.