El punto de partida para Combo Estudio, responsable de este proyecto, fue integrar y conectar las nuevas áreas con el propio Hotel Indigo Madrid. Varios espacios unidos por una sutil inspiración mejicana: colorida, con diferentes geometrías, y en el que cada uno tuviera su propia esencia y conviviera con el ambiente cosmopolita del hotel. “Hemos creado espacios funcionales, operativos, con una estética que mezcla estilos, pero que conectan entre sí y con el hotel gracias al tratamiento del color, empleando el añil y otros azules en gama, los verdes y los ocres metalizados, algunos de ellos colores que ya existían, pero que hemos reforzado o matizado”, explica Julio Plaza, uno de los responsables del estudio de interiorismo.
Bajo esta premisa, el hotel reforma su lobby, trasladado el bar que se ubicaba en la entrada al fondo de la planta baja. Y, lo que era el bar, pasa a ser ahora un sofisticado y cosmopolita salón lleno de confortables sofás de diseño. Era importante generar una zona de espera más amable, conectada con la recepción y donde se potenciase la luz natural. Generando un espacio formado por pequeños ambientes acogedores y otros que invitan a relacionarse, se emplean materiales y colores naturales y frescos que potencian la luz.
Proyecto: Combo Estudio. Fotografías: Okland. Indigo Madrid.