Hotel Ambassador, Benidorm
El diseñador de interiores Oscar Vidal ha sido el encargado de reformar el hotel Ambassador Playa, que forma parte del grupo Hoteles Benidorm. Dentro de la oferta del grupo, el Ambassador es el hotel de mayor capacidad y el de un ambiente más lúdico y relajado. Su oferta de ocio incluye cuatro bares, piscina con espectáculo y un wellness centre.
El edificio se sitúa en la zona más turística de Benidorm y fue construido en los años 70 dentro de la gran expansión de la ciudad. Aunque las zonas comunes habían sido reformadas con cierta periodicidad, el hotel necesitaba una profunda renovación para pasar de tres a cuatro estrellas.
En el concepto de diseño, una de las premisas fue potenciar ese carácter lúdico y relajado del hotel, así como darle una atmósfera luminosa y “mediterránea” con el uso de texturas y colores naturales. Así pues, uno de los elementos más característicos del edificio es su fachada con barandillas de cristal rosado en una perfecta armonía con las paredes blancas y el cielo azul. El conjunto regular de balcones angulosos pierde su rigidez y se convierte en un atractivo ambiente que transporta a destinos como Miami o California.
Ya en el interior, los pasillos se plantean con un ambiente marítimo, a modo de camarotes de barco, y en las habitaciones se apuesta por una serie de revestimientos de aspecto luminoso y natural. Las melaminas de maderas claras y revestimientos de pared, armario y tapicerías ofrecen un acabado refinado pero acogedor. Una colección de cuadros de temática surf refuerzan el ambiente vacacional y playero.
Proyecto y fotografías: Oscar Vidal. Arquitectura: FR Ingeniería y Arquitectura.
Construcción: Antonio Pérez Construcciones. Carpintería: Voolcan Full Contract.
Amueblamiento: Antonio Pamies.